Elegir el tipo de toldo adecuado puede marcar la diferencia en la comodidad, el diseño y la protección de un espacio exterior. En Chile, donde el clima puede sorprender con intensos rayos de sol en verano y lluvias repentinas en invierno, surge una duda frecuente: ¿son mejores los toldos impermeables o los toldos tradicionales?
Cada opción tiene ventajas específicas, desde la protección total contra el agua hasta la frescura y ventilación que aporta una malla de sombra. En este artículo exploraremos las diferencias, beneficios y usos de ambos tipos de toldos.
¿Qué son los toldos impermeables?
Los toldos impermeables están hechos de telas o lonas totalmente selladas que no permiten el paso del agua. Suelen fabricarse con PVC, poliéster recubierto o acrílicos técnicos con recubrimiento impermeable.
Se usan en estructuras fijas (marquesinas, pérgolas) donde se quiere protección contra la lluvia además del sol.
Por ejemplo, los toldos fijos tipo marquesina incorporan lonas impermeables para un cierre completo. Estos toldos deben instalarse con ligera pendiente (al menos ~20 %) para drenar el agua de lluvia.
Ventajas de los toldos impermeables
- Protección total contra lluvia y sol: Alta durabilidad frente a condiciones climáticas adversas. Al ser 100 % estancos, repelen el agua por completo y bloquean la luz solar directa. Ideal en climas lluviosos o para cubrir áreas críticas (estacionamientos, entradas, etc.). Bloquean la mayoría de los rayos UV.
- Durabilidad y robustez: Suelen incluir estructuras metálicas resistentes. La lona impermeable (p.ej. PVC) es muy duradera y resistente al viento y a la intemperie.
Desventajas:
- Menor ventilación: Al no dejar pasar el aire, pueden generar efecto invernadero bajo el toldo. A diferencia de las mallas de sombra, las telas opacas atrapan calor, por lo que el ambiente bajo el toldo impermeable suele ser más cálido.
- Peso y estructura: Son más pesados, requieren bastidores fuertes y anclajes sólidos. Además, al cubrir completamente, bloquean la vista al cielo y la sensación de amplitud.
- Necesitan pendiente y mantenimiento: Para evitar acumulación de agua, se deben colocar con bastante inclinación. Si se estanca agua o se arrugan, pueden dañarse o generar filtraciones.
- Costo: Precio generalmente más elevado debido al tipo de lona y estructura utilizada.
¿Qué son los toldos tradicionales?
Los toldos tradicionales suelen referirse a cubiertas de lona o tejido técnico que ofrecen protección solar básica, pero que no siempre son impermeables. Incluyen toldos retráctiles, de brazo extensible o pérgolas de tela ligera.
En general filtran la luz más que bloquearla completamente, ofreciendo sombra confortable sin perder ventilación.
Su uso es común en terrazas, balcones y fachadas, brindando sombra y mejorando el confort térmico.
Ventajas de los toldos tradicionales
- Costo: su precio inicial es más bajo en comparación con los impermeables.
- Ventilación natural: el tejido permeable deja fluir el aire, reduciendo el calor interior. Esto mejora el confort térmico y refresca naturalmente el espacio.
- Diseño e instalación: gran variedad de diseños y colores. Su instalación es sencilla y adaptable a distintos espacios.
Desventajas
- Menor resistencia al agua: no todos los toldos tradicionales bloquean la lluvia.
- Mantención: pueden perder color o resistencia con el paso del tiempo y en algunos casos requieren mayor mantención.
Toldos vela y velas tensadas: diseño moderno y funcional
Dentro de las soluciones más actuales destacan los toldos vela o velas tensadas, una variante moderna del toldo tradicional y cuya principal característica son superficies triangulares o poligonales de tela tensada entre postes o muros.
Su diseño minimalista y adaptable los ha convertido en tendencia en Chile y en muchos otros países.
Estas velas tensadas destacan por su diseño limpio y estético y por permitir ventilación natural.
Un aspecto clave es que pueden fabricarse en versiones impermeables o transpirables, según la necesidad del proyecto.
Al estar hechas con mallas tejidas (HDPE, poliéster, etc.), dejan pasar parte del aire y refrescan el espacio.
Además, las telas de alta calidad integran aditivos UV que que le otorgan gran resistencia a la degradación por efecto de la radiación solar.
Por ejemplo, la tela Colourshade HDPE que ofrece Arquitex tiene un factor de sombreo de 80–97 % (según color) y bloquea hasta el 95 % de los rayos UV.
Ventajas de los toldos vela
- Ventilación natural: El tejido permeable deja fluir el aire, reduciendo el calor interior. Esto mejora el confort térmico y refresca naturalmente el espacio. Arquitex ha desarrollado telas especiales (como la Malla Driz con recubrimiento repelente al agua) para evitar goteos durante lloviznas. Si quieres conocer más acerca de cómo refrescar ambientes, puedes leer el artículo Cómo refrescar tu casa sin aire acondicionado en el blog de Arquitex.
- Bloqueo selectivo de UV: Filtran gran parte de la radiación ultravioleta sin oscurecer por completo. Algunos tejidos especializados bloquean más del 90–95 % de los rayos UV dañinos.
- Diseño versátil y liviano: Las velas tensadas aportan un estilo moderno y pueden adaptarse a casi cualquier forma o espacio. No requieren armaduras voluminosas: el mismo tejido bien tensado es la estructura. Arquitex ofrece una amplia gama de colores resistentes a la radiación UV para integrarse con el entorno. Para complementar esta información puedes leer el artículo Colores de toldo: Cómo elegir el correcto en el blog de Arquitex.
- Instalación en múltiples puntos: Se pueden colocar en patios, jardines, colegios o estacionamientos; su versatilidad permite cubrir áreas irregulares usando varias velas coordinadas.
Ventajas generales de la malla de sombra
Además del confort, las mallas técnicas tienen beneficios adicionales. Por ejemplo, mejoran la eficiencia energética de un edificio al reducir la carga térmica interior.
A nivel agrícola se ha demostrado que el sombreado con mallas aumenta la eficiencia en el uso del agua en cultivos (viñedos de Chile).
¿Cómo elegir? Factores clave
Para decidir entre un toldo impermeable, tradicional o vela tensada, debes considerar:
Clima local
Si tu zona es lluviosa o ventosa, un toldo impermeable te dará respaldo todo el tiempo. En cambio, en clima árido/seco, una vela tensada con malla bastará para dar sombra y refrescar naturalmente.
Uso del espacio
¿Necesitas usar el área bajo el toldo en épocas de mucha lluvia? En ese caso, un toldo impermeable es mejor. En ocasiones pudiera bastar con un tejido con recubrimiento repelente al agua.
Si solo buscas sombra diurna sin preocupaciones por lluvia, la malla tensada es más práctica y ventilada.
Tamaño y forma
Para áreas muy amplias o de forma irregular, las velas triangulares se adaptan bien y permiten la utilización o combinación de varios toldos (p. ej. combinar dos velas para una terraza en “L”).
Los toldos impermeables grandes requieren estructuras rígidas, suelen ser más simples en forma (rectangular, con pendiente uniforme) y poco versátiles a la hora de cubrir espacios irregulares.
Estética y diseño
Las velas tensadas ofrecen estilo contemporáneo y son muy populares en proyectos arquitectónicos y escolares. En Arquitex, por ejemplo, se fabrican toldos vela que combinan diseño moderno con alto rendimiento.
Un toldo tradicional de lona puede dar un aspecto más clásico (marquesina o pérgola), según convenga al estilo del lugar.
Mantenimiento
Las mallas de calidad requieren limpieza ocasional de polvo y revisión de tensores.
Un toldo impermeable además de necesitar cuidados similares se requiere verificación de que el drenaje funcione bien.
En ambos casos, se recomienda usar herrajes de acero inoxidable para prolongar la vida útil.
Costo
En general, las velas tensadas pueden resultar más económicas para grandes áreas pues evitan largas estructuras metálicas.
Los toldos impermeables suelen ser más costosos debido a las estructuras necesarias para soportarlos, pero más resistentes a condiciones de lluvia extrema.
En resumen, no hay una “mejor” opción única: la elección depende de cada proyecto.
En muchos casos, una solución híbrida (impermeable pero con ventilaciones, buen diseño, pendientes y tensión) resulta la alternativa más equilibrada.
Analiza tu clima local, tus verdaderos usos del espacio, y cuenta con asesoría técnica. En Arquitex te podemos acompañar en esa decisión para que el toldo que elijas funcione en la realidad, no solo en la teoría.
Un toldo bien planificado mejora el confort, ofrece protección contra los rayos UV y prolonga la vida útil de los espacios al aire libre.